Ha salido en los medios de comunicación, el Getxoberri la ha sacado en su portada. Es remera del club Getxo Arraun y se entrena en un centro de alto rendimiento. Está obteniendo marcas que pronostican un magnífico futuro en la competición. Solo por eso es alguien excepcional. Que una persona tan joven quiera dedicarse al deporte de alto nivel, que se aleje del entorno protector de su familia para entrenarse duramente y así conseguir su meta, tiene un valor extraordinario. Más si es una chica. Los estereotipos y patrones culturales han condicionado la afición al deporte de las mujeres, desde temprana edad. Además, ya se sabe, en general, los deportistas están mejor valorados y salen más en los medios que las deportistas.
Nos imaginamos lo duro que debe ser plantearse esos retos y la satisfacción que se obtiene cuando se aprecia la progresión en el rendimiento. Para responder a las exigencias del deporte de alto nivel se necesitan condiciones físicas excepcionales, pero también habilidades emocionales que ayuden a plantear y abordar los desafíos. Todo eso parece tenerlo esta chica.
Admiramos a Garazi Bilbao, por el esfuerzo que hace. Apareciendo en los medios de comunicación se convierte en un referente para otras chicas. El Getxoberri ha elegido muy bien su portada y demuestra su interés en la transmisión igualitaria de valores.
Luisa Alonso-Cires
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