viernes, 4 de septiembre de 2009

Necesitamos una Casa de las Mujeres en Getxo


Las mujeres de Enclave hemos venido reivindicando desde nuestros comienzos, hace ya dos años, la necesidad de una CASA DE LAS MUJERES en nuestro municipio, GETXO.

Resulta obvio que nuestra petición no ha tenido resultado, la última explicación recibida en el pleno de julio por parte del Sr. Alcalde fue que es más importante el contenido que el continente en las prioridades del equipo de gobierno en cuanto a políticas de igualdad se refiere.

La existencia de una casa de las mujeres en nuestro municipio no es baladí, no se trata de un capricho y, si quienes nos gobiernan tuvieran un conocimiento real e integral de lo que supone la perspectiva de género, no la practicarían de manera tan aséptica como lo vienen haciendo.

Dar un tratamiento aséptico a la perspectiva de género, sí, entendiendo por género mujer, sin detenerse en el análisis y la comprensión de los procesos, la crítica y las propuestas de cambio, consiguiendo favorecer sólo algunas reivindicaciones de las mujeres, reducidas o parciales. Así consiguen una débil oposición al patriarcado y un limitadísimo apoyo a las mujeres.

Desde este tratamiento aséptico también se visibiliza a las mujeres y se descorre algún velo de opresión, pero es excepcional que se indaguen las causas profundas y complejas de la condición femenina y de su situación de vida, así como de los procesos históricos que las originan y producen. Puede ser que se busque aminorar manifestaciones de pobreza, discriminación y violencia, y ampliar un poco la participación de las mujeres; pero siempre sin tocar las fuentes del dominio y sin plantear ni promover cambios genéricos en los hombres, familias, comunidades e instituciones.

Esta asepsia, que está destinada a mantener intocado en sus fundamentos al patriarcado y a sus poderes institucionales, se apoya en una visión sexista.

Desde la posición aséptica suele ignorarse que la perspectiva de género permite apoyar a las mujeres, pero que son ellas mismas quienes realizan los cambios, se arriesgan y actúan para enfrentar situaciones insoportables por injustas, para sobrevivir, para mejorar y para construir alternativas. Porque los motivos de las mujeres no están en la perspectiva de género, sino en su vivencia del género.

Como ya describimos en febrero del 2008, la CASA DE LAS MUJERES DE GETXO debe ser un espacio emblemático y visible para el encuentro, para la integración, para la sororidad; de información, formación y asesoramiento…; en suma, es algo más que un continente, es un requisito necesario, aunque no suficiente, para poder decir que en nuestro municipio se aplica la perspectiva de género de verdad y no de manera aséptica.

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